No he podido resistirme y he titulado este artículo como «el otoño vivel», porque para mí tiene un significado especial: es la forma en la que mi hijo se refiere al «Otoño» de Vivaldi. Le encanta la música, y, especialmente, esta música.
Es importantísimo iniciar a nuestros pequeños en la música, ya desde bebés… Podemos enseñarles sonidos y ritmos con canciones infantiles, dar palmas… De hecho, es lo que solemos hacer, porque nos sale instintivamente. Haciendo esto, no sólo nos divertimos con nuestros hijos, sino que también estimulamos su inteligencia emocional y les ayudamos a desarrollar emociones y sentimientos.
En general, se recomiendan canciones de letras sencillas y repetitivas. Cuánto más pegadizas mejor. También son muy receptivos a la música clásica de fácil estructura y de corta duración.
La música apasiona a los niños y, además de disfrutarla, tiene muchos beneficios para su desarrollo.
BENEFICIOS DE LA MÚSICA EN EL NIÑO
- Favorece la coordinación: le ayuda a coordinar sus movimientos cada vez mejor.
- Sociabilidad: le ayuda a integrarse en el grupo, bailando, haciendo corros…
- Memoria: Al retener la letra de una canción y los movimientos que la acompañan aumenta su capacidad memorística.
- Inteligencia: El baile es música; la música, ritmo, y el ritmo y los compases, combinaciones numéricas. Hay estudios que confirman que los niños que se aficionan a la música desde pequeñitos tienen más facilidad para aprender los números y los primeros conceptos matemáticos.
- Creatividad: La música estimula el área derecha del cerebro, por lo que mejora la capacidad para realizar cualquier otra actividad artística, como la pintura.
- Establecimiento de rutinas: Si cuando dibuja le ponemos una música, cuando se va a acostar, otra, y cuando le apetece bailar, otra, establecerá asociaciones entre la música y sus actividades, algo que le ayudará a establecer rutinas, sentando así las bases de una futura disciplina.
- Contribuye a mejorar su lenguaje. Las letras de las canciones, además de favorecer su discriminación auditiva, enriquecen su vocabulario.
Y, aprovechando que estamos en otoño, voy a cerrar este artículo con un poquito de música: El «Otoño» de Antonio Vivaldi, que tanto emociona a mi hijo 🙂
Trackbacks/Pingbacks